Efectos en tu cuerpo al volar sobre 10.000 metros de altura
Volar a altitudes extremadamente altas puede ser una experiencia emocionante y alucinante, pero también puede tener efectos en tu cuerpo. A medida que subes a más de 10.000 metros de altura, tu cuerpo experimenta cambios significativos que pueden afectar tu salud y bienestar. En esta entrada, exploraremos los efectos que el vuelo a gran altitud tiene en tu cuerpo y cómo puedes protegerte de ellos.
Efectos en la respiración
Cuando estás a bordo de un avión, la cabina se presuriza para simular una altitud más baja. Sin embargo, a medida que el avión sube, la presión del aire disminuye y el oxígeno en el aire se vuelve menos denso. Esto puede hacer que te sientas sin aliento o con dificultad para respirar. Si bien la mayoría de las personas no experimentan problemas respiratorios graves, aquellos con afecciones pulmonares preexistentes pueden tener problemas para respirar a gran altitud.
Efectos en la audición
El zumbido en los oídos es una queja común entre los viajeros aéreos. Esto se debe a que la presión en el oído medio cambia a medida que el avión sube y baja. Si no se iguala la presión, puede haber una sensación de bloqueo en los oídos o incluso dolor. Afortunadamente, hay medidas que puedes tomar para aliviar estos síntomas, como bostezar, tragar o masticar chicle.
Efectos en la circulación sanguínea
A medida que subes a más de 10.000 metros de altura, la presión atmosférica disminuye y el aire se vuelve menos denso. Esto puede hacer que la sangre sea menos oxigenada y más espesa, lo que aumenta el riesgo de coágulos sanguíneos. Además, el movimiento limitado durante un vuelo prolongado puede dificultar la circulación sanguínea, lo que también puede contribuir a la formación de coágulos sanguíneos. Para evitar esto, es importante que se mueva las piernas y se estire regularmente durante el vuelo.
Efectos en el sueño
Los viajes aéreos prolongados pueden interrumpir tu ciclo de sueño natural. Esto se debe a que la cabina del avión puede estar iluminada o ruidosa, lo que puede dificultar el sueño. Además, el cambio de huso horario puede provocar jet lag, lo que puede afectar tu capacidad para dormir bien. Para minimizar estos efectos, es importante dormir lo suficiente antes del vuelo y ajustar tu horario de sueño gradualmente antes y después del vuelo.
Conclusión
Volar a más de 10.000 metros de altura puede tener efectos en tu cuerpo que van desde la dificultad para respirar hasta el riesgo de coágulos sanguíneos. Sin embargo, con las precauciones adecuadas, como el movimiento regular y la hidratación, puedes minimizar estos efectos y disfrutar de un vuelo seguro y saludable.
Preguntas frecuentes
¿Es peligroso volar a más de 10.000 metros de altura?
No necesariamente, pero puede tener efectos en el cuerpo a los que debes estar atento.
¿Cómo puedo aliviar la presión en los oídos durante el vuelo?
Puedes aliviar la presión en los oídos bostezando, tragando o masticando chicle.
¿Cómo puedo minimizar el riesgo de coágulos sanguíneos durante un vuelo prolongado?
Es importante que te muevas y estires regularmente durante el vuelo para mantener una buena circulación sanguínea.
¿Cómo puedo evitar el jet lag?
Puedes ajustar gradualmente tu horario de sueño antes y después del vuelo para minimizar los efectos del jet lag.
¿Debería preocuparme por la falta de oxígeno durante el vuelo?
No necesariamente. La cabina del avión está presurizada para simular una altitud más baja, pero es importante que esté atento a cualquier síntoma de dificultad para respirar.
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